Cataluña y España. Solidaridad Obrera (19-4-1931)




El derrumbamiento de la monarquía con su séquito de tiranuelos y dictadores, ha puesto al descubierto lo que latía en lo más íntimo del corazón del pueblo. Hay que reconocer que se han exteriorizado de una manera espontánea sentimientos que hasta hoy parecían ignorados, habiendo adquirido una fuerza y extensión extraordinarias aquellos anhelos vehementísimos que mantenían en franco espíritu de rebeldía a determinados sectores de la opinión.

Particularmente en Cataluña y, en parte también, en Vizcaya, la tendencia nacionalista se ha manifestado con un empuje formidable. No haremos historia de las causas que han determinado que en esta región hayan arraigado tan considerablemente estos ideales de nacionalismo. Los que más hicieron para combatirlos son, seguramente, los más culpables de que hayan llegado donde están. Constatamos el hecho para estudiar las consecuencias que de él pueden derivarse y para evitar, en lo posible, situaciones que serían funestísimas para las libertades que el pueblo acaba de conquistar.

Al proclamarse la República en España, los elementos nacionalistas de Cataluña procedieron inmediatamente a la proclamación de la República Catalana. Desde el primer momento, aunque marchando de acuerdo con el movimiento general de la Península, advertimos un peligro para el triunfo revolucionario, al ver como se constituía y pretendía actuar el Gobierno Provisional de Cataluña. Un peligro, porque conocemos el problema y sabemos que las fuerzas republicanas de todos los matices, de la región y del resto de España, han de oponerse a la constitución del "Estat Catalá", máxime teniendo en cuenta que esta fuerza no cuenta con las simpatías generales del pueblo.

Este peligro, de momento conjurado, puede amenazar seriamente la vida de la naciente República española y comprometer las libertades ciudadanas si los que deben inspirarse en las necesidades del bien general persistieran sistemáticamente en sus propósitos.

De la gran pugna entre Barcelona y Madrid se aprovecharían -lo han intentado ya- los elementos reaccionarios que sabemos andan por ahí coleando, dispuestos a coger por los cabellos la primera ocasión que se les presente.

Es de todo punto necesario que los ciudadanos del "Estat Catalá" se convenzan de que la admiración que se siente por la venerable y estimada personalidad de Maciá no tiene ninguna relación con los deseos del pueblo catalán.. Este no permitirá nunca que se pongan límites y fronteras entre él y sus hermanos de las demás regiones.

Especialmente los obreros, no consentirán jamás que las barreras políticas separen al proletariado de España. La C.N.T. se opondrá enérgicamente a esta división de los trabajadores hispanos.

Hemos proclamado siempre que las fronteras son el mayor enemigo de los obreros organizados; y si nuestras organizaciones tienden a un abrazo internacional por encima de todos los obstáculos, es muy natural que no aceptemos más divisiones de las que sufrimos.

Hay un caso que debería ser un ejemplo y una advertencia para los románticos nacionalistas que siguiendo los errores de la tradición quisieron proclamarse en cantón independiente. Las fuerzas liberales y revolucionarias de Portugal han manifestado su deseo de constituir la Federación de Repúblicas de Iberia. Los ciudadanos portugueses, con un espíritu de fraternidad universal digno de admiración, quieren pasar por encima de las fronteras y abrazarse en lazos de sincera amistad con sus hermanos de España. Por un excesivo sentimiento de amor propio algunos catalanes quisieron romper los lazos de unión con el resto de la Península. El contrasentido es de una evidencia decepcionante.

Sabemos muy bien y lo hemos dicho en más de una ocasión, que los republicanos de Cataluña son mucho más avanzados que los republicanos del resto de España, y muy particularmente de los que constituyen el Gobierno Provisional de Madrid. Pero entendemos que el pueblo catalán puede disfrutar de las máximas libertades que se pueden elaborar al amparo de la más amplia autonomía en la constitución de una República Federal. Lo demás es absurdo e irrealizable.

Conste que sin ser republicanos ni políticos, no estamos dispuestos a que por un juego de romanticismo y de sentimientos tan respetables como todos, pero sin posibilidades de realizaciones prácticas, se provoquen rozaduras que puedan comprometer la salud de la revolución.

La C.N.T. está aquí para oponerse al quebrantamiento de la unidad revolucionaria, cuya consecuencia inmediata sería el triunfo de la reacción.

Ya en la Conferencia de Izquierdas tuvimos que hacer observar las intemperancias de algunos elementos del "Estat Catalá"; intemperancias que sin la oportuna intervención del venerable Maciá hubieran malogrado la labor de aquella asamblea.

Como entonces, el querido amigo Maciá debe intervenir para evitar que la exaltación de los sentimientos nacionalistas destruya el edificio revolucionario.

Pensad, sobre todo, ciudadano Maciá, que los trabajadores que os dieron el voto, como vos afirmáis, no lo hicieron para que se les separe de sus hermanos. El plebiscito del día 12 se manifestó contra la reacción de Cataluña y España y por la libertad de todos los ciudadanos de la Península.

La C.N.T. con sus principios libertarios y su organización federalista vive en el corazón de todos los trabajadores de España y sabe extender su mano por encima de las fronteras para abrazar a todos los trabajadores del mundo.

Vuestra República Federal debe abrazar a los ciudadanos de todas las regiones, y no consentir que los excesos nacionalistas se impongan para declarar como enemigos nuestros a los que viven en la otra orilla del Ebro. Por la libertad y la fraternidad universal estamos con vosotros. Y contra todos, cuando se intente servir a la reacción y dividir a los pueblos.


Borbones: jaque mate a la inteligencia en una semana



Ya tenemos nuevo rey, sólo han necesitado una semana para darnos el cambiazo real. Quitar a un Borbón para poner a otro, así se soluciona la podredumbre que pudre a la casa real desde tiempos ancestrales. Pasamos del campechano al preparado, aunque ambos son borbones; el campechano te roba con una sonrisa y el preparado ni se inmuta, ni pestañea, a la hora de actuar, igualico que la Sofea de su madre. Por algo el Club Bilderberg nunca invita al rey, pero hace muchos años que la reina acude a estas reuniones de la flor y nata de la escoria fascista mundial. Me atrevo a vaticinar que en la próxima reunión del Bilderberg estará presente el nuevo rey estirado, porque él sí que está preparado para jodernos bien a todos. A Juan Carlos I "El Crápula" solamente le importaba amasar dinero, cazar animales exóticos y empujar a la Corinna y alguna zorrita de lujo más, pero Felipe VI "El Preparado" sabe exáctamente lo que quiere, lleva pensándolo más de 40 años; este va a dejar a su padre en bragas en cuanto a darle la espalda a su pueblo se trata.

Gentuza vestida de gentuza
Durante toda la repugnante y carpetovetónica ceremonia de coronación los militares aparecen por todas partes, tanto su padre como él se nos presentan "pulcramente" vestidos de monigotes castrenses; incluso el plato fuerte de la mañana fue el traspaso del fajín de Capitán General de todos los ejércitos, heredado gracias a su degenerada genética borbónica. 

El mensaje es claro y conciso, ojito los republicanos y antimonárquicos, la legitimidad del rey no necesita ser refrendada por el pueblo, para eso tiene tras de sí a los tres ejércitos españoles, puesto que él es su jefe supremo, ¿quién tiene algo que objetar? El mismo ejército que nunca hizo nada bueno por su pueblo, el mismo ejército que mantuvo durante 40 años una dictadura criminal y sanguinaria; el mismo ejército que ha sujetado durante casi otros 40 años el nudo gordiano del paquete bien atado que nos dejó el Cabronsísimo como herencia.

Muchos dirán que el ejército actual nada tiene que ver con el de los generales que ganaron la guerra, ilusos, más bien quieren creerlo; pero ya verán si al pueblo se le ocurre pensar más de la cuenta y exige votar república o monarquía, ya verán. Los tres ejércitos están infiltrados por el Opus en donde duele, en los altos mandos (sobre todo en Tierra y en la Marina). El ejército no existe para defender a su pueblo, no amigos, su función es bien distinta. El ejército español sigue siendo como siempre el garante del orden establecido, o mejor dicho, impuesto, matones a sueldo del Estado terrorista y fascista español, los guardaespaldas del principito estirado que no habla más que con quien tenga 15 apellidos y varios títulos aristocráticos.

Lo de la reina es de traca fallera. Nos venden la moto con el temita de que el principito se ha casado con una plebeya ¿hemos avanzado algo en España desde la Edad Media?, se ha casado con alguien que tiene la sangre roja y no azul, como la de los falangistas, ¡qué príncipe más majo y moderno tenemos!, ¿verdad?. Os quiero hacer una sencilla pregunta; si quieres como esposa a alguien que sepa mentir sin pestañear, con una cara bonita que de bien en TV, que sepa hablar sin nunca mostrar en su expresión facial cuales son sus sentimientos reales, ¿quién puede ser mejor que una reconocida periodista... y presentadora del telediario de la primera cadena estatal en tiempos de Aznar?, digánme si existe alguien que sea mejor candidata al trono que esta advenediza trepadora de profesión, es el perfil perfecto para perpetuar el engaño monárquico. La otra razón de que la familia tocada por la gracia de Dios se rebaje a mezclar sus genes con la plebe no es otra que su propia depravación genética, sólo hay que ver para creer...

¿A quién visitó el rey crápula nada más abdicar?, pues precisamente a los empresarios, a sus amiguetes; y para más poca verguenza terminó el acto prometiéndoles que siempre estaría con ellos, cosa natural, porque su fortuna se la debe a esta gentuza, ya que el también crápula de su padre se gastó la caja real en putas y whisky, para no romper con la tradición familiar más que nada. ¿Y después?, ¿a cuál espectáculo denigrante para la condición humana asistió?, imagínense, nada menos que a una matanza de toros en Las Ventas, donde fue aclamado por la chusma que gusta de ver estas carnicerías propias de romanos en lugar de ciudadanos del S. XXI.


¿A quién ha visitado el nuevo rey impuesto en su primer acto oficial?, ¿a los niños que necesitan los comedores en verano para poder alimentarse?, ¿a los cientos de miles de jubilados estafados por las preferentes?, ¿a las asociaciones de parados?; no, a las víctimas del terrorismo, no digo que muchas de ellas no merezcan respeto, no creo que asesinar sean maneras de llegar a ninguna parte, pero ¿es realmente eso lo que preocupa más inmediatamente a la sociedad?, el paro es el más acuciante de los problemas que sufre esta sociedad enferma y no el terrorismo, ya les gustaría a los de arriba que nuestra mayor preocupación fuese ETA en lugar de la cola del paro, que tuviésemos miedo además de hambre. 

El primer viaje al extranjero de los flamantes y recién estrenados príncipes será nada menos que al Vaticano. ¡Zas! en toda la frente, van a comunicarle al Papa frita que España sigue siendo la vanguardia del ultracatolicismo europeo, los defensores de la Fe (como los Judas Priest...). Durante el besa manos anterior al ágape real todos los invitados se inclinaron ante "sus majestades", todos menos uno, Rouco Varela, en este caso fueron los reyes quienes les hicieron una reverencia a esta cucaracha con hábito (de robar y mentir). Ahora también iran a rendirle pleitesía al enviado de Satán que habita en el Vaticano; militar, ultracatólico y Borbón, este es el príncipito preparado para el S. XXI, aunque sus costumbres siguen siendo las mismas que las de sus miserables antecesores en el trono, desde la Alta Edad Media al menos oigan.

Pues bien, nos han colocado a otro Borbón en cuestión de una semana, como el cambiazo de los trileros, que es tan rápido que te desconcierta y no sabes por donde ni como te la han colado; pero el caso es que te la han colado, si has tenido buena vista y el trilero ha querido pasarse de listo, junto a él hay varios más que te "convencerán" de que el juego ha sido limpio y claro. Esperemos que el timo dure poco y el pueblo íbero no vuelva a dejarse estafar de nuevo, ¡larga vida a la libertad y corto recorrido a la mentira impuesta!


Fernando Zamora, alcalde de S.J. Aznalfarache, es un sociata fascista


F. Zamora, cerdo fascista. Si te dijera que es del PP ¿notarías la diferencia?
Cada día que pasa creo ser más consciente de que en este país siempre son los cuatro de siempre quienes dan la cara por el bien común de todos, la "mayoría silenciosa" (al igual que los corderos) se me antoja mucho más numerosa de lo que hasta ahora creía. En estos aciagos tiempos históricos que nos han tocado vivir, los de abajo ya no contamos con algo fundamental, la conciencia de clase. Ya nadie quiere ser obrero, eso es algo del pasado al parecer, no es raro ver en la cola del paro a muchas personas quejándose de su situación mientras hacen el gilipollas con su nuevo smart phone de última generación. Con lo que cuesta este cacharrito que es "imprescindible" en nuestros días, (como suelen decir lxs imbéciles de turno), una familia podría comer todo un mes; pero muchos prefieren darle patatas fritas con huevo a sus hijos con tal de fardar (o así lo creen) de móvil, así se sienten importantes los nimalicos; suplen su humanidad, su capacidad intelectual, su personalidad con zarandajas made in China.

Cuando se intenta poner en marcha una asociación contra el fascismo, de parados o para unos huertos sociales, nunca falta la gentuza que vino a este mundo para destruir en lugar de construir. La plataforma contra el fascismo existente en mi pueblo es una pantomima de monigotes varios. Allí podemos encontrar desde el típico lameculos del alcalde de turno hasta los profesionales de la propaganda marxista disfrazados de movimiento social. Las diferentes asociaciones de parados (y ya van tres), están formadas por personas que solamente buscan su propio interés, una vez conseguidos sus objetivos les importa una mierda el bien común, y además ven este comportamiento de lo más natural y lógico, de vómito irrefrenable vaya.


En cuanto a los huertos sociales, más podredumbre moral por parte de nuestros iguales, los de abajo, y esta sí que duele, porque la miseria moral de los ricos es algo intrínseco a sus cunas, pero que sean tus propios iguales quienes conspiren para cargarse tantas horas de dedicación solamente por buscar su propio interés, es algo difícilmente digerible. En los Huertos Sociales Autogestionados de San Juan de Aznalfarache, proyecto ideado por Mujeres Libres del Aljarafe y llevado a cabo junto a los vecinos del pueblo, se ha querido dar voz y voto a todas y cada una de las personas que tienen asignada una parcela. Si estos huertos hubiesen sido idea del ayuntamiento aquí no se le preguntaría a nadie su opinión, el alcalde ordenaría, los municipales impondrían y todos a callar y a acatar. 

Pues bien, resulta que gracias a nuestra enferma y podrida sociedad, existe gentuza tan desagradecida y con un egoismo tan ilimitado que eso de la libertad les parece un "vacío de poder". Acostumbrados durante toda sus miserables vidas a obedecer, se sienten desorientados cuando se les pregunta su opinión y esta es escuchada y tomada en cuenta, para ellos es más fácil que alguien les ordene qué deben hacer, eso evita el tener que pensar... aunque a estas hienas humanas lo que realmente les preocupa es la opinión de los demás, cosa lógica para todo aquél que tiene cabeza para no llevar el serrín en la mano.

Huertos Sociales Autogestionados S. J. Aznalfarache

Los asquerosos sociatas que gobiernan nuestro pueblo, con Fernando Zamora al frente como alcalde, han puesto todas las trabas posibles para que este proyecto sea la realidad que es a día de hoy. Estas cucarachas sociatas se han dedicado a explotar la indignidad de algunos hortelanos para usarla en contra de la asociación que está a cargo de los huertos. Pretenden ponerse ahora las medallas de la creación de unos huertos sociales para las familias más necesitadas del pueblo. La principal razón de todo ello estriba en que esta asociación es de mujeres libertarias, y claro, para ningún partido político es plato de gusto ver como lxs anarquistxs consiguen llevar adelante un proyecto que provee de ricas hortalizas ecológicas a 100 familias del pueblo.

Fernando Zamora es otro mangante más que va de socialista, pero en la práctica diaria no es más que un asqueroso fascista que maneja los dineros del pueblo como si de su propio cortijo se tratase. Sus maniobras fascistoides serán debidamente denunciadas y publicitadas para conocimiento de todos los habitantes de nuestro pueblo. Ya está bien de aguantar el caciquismo del PSOE-A, ya es hora de poner en su sitio a estos farsantes que escupen a diario sobre el buen nombre del socialismo. En lugar de fomentar la unión de los trabajadores para conseguir algo de provecho para todos, solamente saben dividir a los de abajo para ellos seguir mandando y comiendo marisco a costa de la caja común, el PSOE-A terminará hundiéndose bajo el peso de su propia mierda.


Con la República o contra ella si fuere preciso. Solidaridad Obrera (15-4-1931)



Se ha proclamado la República en España. La ha proclamado el pueblo en la calle. Lo sabíamos; habíamos afirmado que la voluntad de los ciudadanos tendría que imponerse por la fuerza. Por fuerza ha tenido que imponerse, aunque haya sido sin efusión de sangre. Sin efusión de sangre hasta el momento.

En el instante que escribíamos estas líneas, no podemos todavía vaticinar cual será el desenlace final. Tenemos motivos para dudar y dudamos. Dudamos porque sabemos que la trágica figura del último de los Borbones aún planea sobre España su sombra fatídica. Porque sabemos que en la reunión de capitanes generales, Despufol se había puesto incondicionalmente al lado del asqueroso espectro de Alfonso, y porque en estos momentos ha sido izada la bandera republicana en todos los centros oficiales excepto Capitanía General.

El miserable sucesor de Fernando VII continua en Madrid; y a pesar de haber renunciado a la corona y haberse encargado del Poder Alcalá Zamora como presidente del Gobierno Provisional, su presencia en la capital de España, es un peligro, una amenaza que está todavía suspendida sobre la cabeza de todos los ciudadanos. Sobre todo, si se tiene en cuenta que la fuerza está en manos de los militares.

Quizás, cuando aparezcan estas líneas, el peligro será conjurado. Tanto mejor; pero, por si acaso, la Confederación Nacional del Trabajo, debe tener tomadas todas las precauciones. Nos es completamente imposible decir lo que se agolpa en nuestra mente. Vivimos minutos que parecen siglos. Cada uno de estos instantes son realmente siglos; y cada una de las impresiones que recibimos son un tomo de la Historia que habrá de escribirse dentro de algunos años. Todos los comentarios que pudiéramos hacer serían un pálido reflejo de la realidad. Deben hablar los hechos. Las noticias de las agencias son mucho más elocuentes que toda la literatura revolucionaria.

Precisaremos únicamente lo que en estas difíciles horas debe ser el decálogo del ciudadano y especialmente del obrero.

La revolución política es un hecho. Tenga ésta el desenlace que sea, y no importa el curso de los acontecimientos, esta revolución será coronada por el triunfo.

Pero aquí quedamos nosotros. Aquí está la C.N.T. que está prevenida y dispuesta para imponer su personalidad y para que sus derechos sean reconocidos en este nuevo estado de cosas.

La C.N.T. debe afirmarse; pero no con palabras, sino con hechos. Y debe estar dispuesta para oponerse a toda tentativa que intentara mermar tan siquiera una mínima parte de nuestra personalidad.

Estamos en plena revolución y debemos aprovechar los instantes que son decisivos para nuestra salud.

Cumplamos todos con nuestro deber, acatando de una manera absoluta los acuerdos de la organización.

Y basta de palabras, que la pluma se resiste porque mejor quisiera ser una lanza que pudiera atravesar el corazón de todos los Borbones y demás asesinos que hasta hoy han secundado sus criminales designios.

Todos en pie de guerra con la República y contra la República si fuere preciso. Por la Revolución y la Libertad

¿Viva el proletariado revolucionario! ¡Viva la Confederación Nacional del Trabajo!



Las Prisiones. P. Kropotkin. (Texto completo en Pdf)



La cuestión que me propongo tratar esta noche es una de las más importantes en la serie de las grandes cuestiones que se ofrecen a la humanidad del siglo XIX. Después de la cuestión económica, después de la del Estado, aquélla es, quizás, la mas importante de todas. En realidad, puesto que la distribución de la justicia fue el principal instrumento en la constitución de todos los poderes, puesto que es la base misma y el fundamento más sólido de los poderes constituidos, no exageraré si digo que la cuestión de saber qué debe hacerse con los que cometen actos antisociales, encierra en si la gran cuestión del gobierno y del Estado.

Muchas veces se ha dicho que la función principal de toda organización política, es garantizar doce jurados probos a todo ciudadano, al que otros ciudadanos denunciaren por cualquier motivo. Pero falta saber qué derechos debemos reconocer a esos diez, o doce, o cien jurados, sobre el ciudadano al que consideren culpable de un acto antisocial y perjudicial para sus semejantes.

Esta cuestión resuélvese actualmente de la manera más sencilla. Se nos responde: ¡Castigarán! ¡Sentenciarán a muerte, a trabajos forzados o a presidio! Y esto es lo que se hace. Es decir, que, en nuestro penoso desarrollo, en esta marcha de la humanidad por entre los prejuicios y las ideas falsas, hemos llegado a tal punto. Mas también ha llegado la hora de preguntar: ¿Es justa la muerte, es justo el presidio? ¿Se consigue con ellos el doble fin que trátase de obtener: impedir que se repita el acto antisocial y tornar mejor al hombre que se hiciera culpable de un acto de violencia contra su semejante? 

Y, para concluir, ¿qué significa la palabra culpable, con tanta frecuencia empleada, sin que hasta la fecha se haya intentado decir en qué consiste la culpabilidad?

A todas estas preguntas propóngome responder; dar un esbozo de respuesta, mejor dicho, en el corto espacio de una velada. Grandes son estas cuestiones, que encierran en sí la dicha, no sólo de los centenares de millares de detenidos que en este momento gimen en nuestras cárceles y presidios; la suerte, no sólo de las mujeres y niños que sollozan en la miseria desde que el cabeza de familia fuera encerrado en un calabozo, sino también la dicha y la suerte de toda la humanidad. Toda injusticia cometida con el individuo, es en último término sentida por toda la humanidad.

200 años del nacimiento de Bakunin



<<No soy verdaderamente libre más que cuando todos los seres humanos que me rodean, hombres y mujeres, son igualmente libres. La libertad de otro, lejos de ser un límite o la negación de mi libertad, es al contrario su condición necesaria y su confirmación. No me hago verdaderamente libre más que por la libertad de los otros, de suerte que cuanto más numerosos son los hombres libres que me rodean y más vasta es su libertad, más extensa, más profunda y más amplia se vuelve mi libertad>>.

M. Bakunin: "Dios y el Estado"

Esta entrada es un humilde tributo hacia Bakunin en el bicentenario de su nacimiento. Os dejo un enlace para descargar una obra autobiográfica suya, nadie mejor que él mismo puede contarnos como fue su azarosa vida, siempre con los más débiles, abandonando voluntariamente las comodidades de las que habría podido disfrutar gracias a sus orígenes familiares. 

Pero él prefirió la lucha por los derechos humanos, situándose en la primera línea de batalla si era preciso. Su recuerdo en forma de los escritos que dejó como herencia para toda la humanidad, siguen siendo fuente de inspiración para millones de personas a lo largo de todo el planeta. Bakunin nunca murió, alcanzó la eternidad a través de sus acciones, de su ejemplo de vida, de su pluma siempre ácida y concisa. Que su luz continúe iluminándonos en esta vuelta a las oscuras cavernas del fascio español.


Miguel Bakunin fue el primer ruso revolucionario que levantó la bandera roja. No obstante, está hoy olvidado. En ello han influido su pleito con Marx y el desarrollo de la gran industria.

Bakunin fundó, con Carlos Marx, la Primera Internacional de los Trabajadores; pero, su desacuerdo con el autor del “Manifiesto Comunista” llegó a tales extremos, que éste prefirió matar la organización en la que el ruso había ganado una influencia poderosa. Cuando Bakunin fue expulsado, las Federaciones Nacionales de Bélgica, Holanda, España e Inglaterra se marcharon con él. Hoy día, la prédica libertaria, más política que económica, y marcadamente individualista de Bakunin, no ha podido resistir a la propaganda marxista sino en España y América Española. Los anarquistas no olvidarán jamás al insigne agitador.

El desarrollo de la gran industria creó en los trabajadores la conciencia de que ellos pueden ganar el poder como clase, y no ya para la burguesía liberal. Con eso se desarrollaron las tesis de “El Capital”. Por otro lado, el trabajo colectivo de las grandes fábricas, atenuó y borró en muchos casos la protesta individualista base de la propaganda bakuninista. La voluntad de ser libre ha sido sustituida por la de cooperar en masa. “A la fase antiautoritaria del socialismo (Bakunin) ha sucedido el socialismo autoritario” (Lenin), dice un biógrafo de nuestro personaje. Nadie, en efecto, habría sido más resueltamente antifascista que Bakunin.

La vida de éste ha inspirado novelas de Dostoiewski y Turguenev, de Lucien Descaves y Maurice Donnay. Fue un tipo contradictorio y en perpetua agitación.

Hijo de un noble y rico señor ruso, dueño de quinientos siervos y de una mujer emparentada con los Muraviev, uno de los cuales fue ahorcado por rebelde y otros tres condenados a trabajos forzados, en su juventud. Bakunin presenció el famoso levantamiento decabrista. Había nacido en 1814. En 1828 fue enviado a Petersburgo a la escuela de artillería. A los dieciocho años, Miguel Bakunin era oficial de esta arma. En cuanto pudo abandonó el cuartel y, con pasmo de su padre, se dedicó a la filosofía y a la ciencia.

Admirador de Kant, Fichte y Hegel, creía en la dialéctica de este último, como en un credo destinado a redimir el mundo y el espíritu. Para conocerla mejor, se dirigió, en 1840, a Alemania ayudado por sus amigos Herzen y Granowski.

Le sorprendió la oposición entre la burguesía y la nobleza feudal, y se afilió al movimiento demócrata germano. Pero, como el gobierno ruso lo espiaba, tuvo que salir de ahí y pasar a Zurich, en donde conoció al sastre comunista Weitling, que lo impresionó mucho. Cuando arrestaron a éste, hallaron entre sus papeles algunos de Bakunin, quien abandonó precipitadamente Suiza, y pasó a Bruselas y a París, donde vivió entre 1844 y 1848.

Entretanto, por la denuncia suiza, el Zar condenó a Bakunin, en 1843, a perder todos sus bienes y a ser deportado a Siberia.

En París, pobre, hambriento, arreció su devoción por las clases oprimidas, más sentimental que lógica, y fue contertulio y amigo de Luis Blanc, George Sand, Lamennais, Flocon, Considerant y acaso, Flora Tristan. Pero, su mayor afecto era para Proudhon, y alguno tuvo para Marx, entonces en esa ciudad.

LA LUCHA

En 1847 pronunció un discurso célebre en una reunión de polacos que conmemoraban el aniversario de su insurrección de 1831. El discurso titulado “La Rusia tal cual es” (Russland wie es wirklich ist) provocó el pedido del embajador ruso para que Bakunin fuera expulsado del territorio francés; al par, el mismo embajador lanzó la especie de que el revolucionario estaba a sueldo del Zar, lo que provocó grandes molestias en la vida de Bakunin. Engels mismo se hizo alguna vez eco de aquella imputación jamás probada.

Pasó a Bruselas. Trató levemente a Marx. Bakunin quería la liberación de los eslavos, primero, y de los oprimidos, después. Marx propugnaba la del proletariado, como clase directora.

Apenas estalló la revolución del 48, Bakunin se lanzó de nuevo a Francia, a participar en ella. Tuvo que hacer tres días a pie para llegar de la frontera belga a París.

Ahí empuñó su fusil y combatió en las trincheras con balas, y en las plazas con discursos: igualdad de salarios, igualdad absoluta, libertad de los eslavos, revolución permanente, ataque al despotismo, guerra sin cuartel hasta acabar con el enemigo.

Ayudado por el gobierno provisorio de Francia, se trasladó a Posnania para amagar a Rusia. Pero, la burguesía armada imponía su ley. En Breslau, los mismos polacos desconfiaron de él a causa de la calumnia del embajador ruso en París. No bien convocaron un congreso eslavo en Praga, voló a esta ciudad. El congreso era producto de sucesivos motines de estudiantes y guardias nacionales. El promotor del congreso fue el partido checo de Palacki. Bakunin defendió su idea de federación de pueblos eslavos y de ataque continuo a las autocracias rusa y austriaca.

Las fuerzas reaccionarias provocaron a los congresos y al pueblo. Combates en las calles. Bakunin estuvo en ellos activamente. Con la derrota, tuvo que huir a Breslau, en junio del 48.

La lucha de Bakunin alcanza contornos dramáticos. En medio de ella le persigue como una sombra fatídica la acusación de ser agente provocador al servicio del gobierno ruso, lanzada ¡por el propio gobierno ruso! Va a Berlín y trabaja con Marx y Stirner. Lo expulsan de Prusia, de Dresde y se refugia en Angalt, donde escribe su “Llamado a los eslavos”, cuya consigna es destruir los Estados ruso, austriaco, turco y prusiano, y emprender una acción común de acuerdo con las fuerzas revolucionarias alemanas y magiares. Contra nobles, eclesiásticos y señores feudales de Bohemia. Por la destrucción de los castillos, la abolición de los tribunales, el desconocimiento de las hipotecas y deudas más allá de 1.000 gúldenes, la casación de los procesos de Estado. Dictadura en Praga, con un consejo de técnicos. Desplazamiento de la juventud revolucionaria en plan de propaganda y acción. Armamentos de los desocupados “rojos” y constitución de un ejército con ellos.

Los checos se asustaron del plan. Bakunin hubo de fugar a Sajonia. Los procesos de Praga acarrearon numerosas condenas.

En Sajonia, el rey había decretado, en 1849, la disolución del Parlamento. Se dijo que llegarían tropas prusianas, y se lanzó el pueblo en contra. Bakunin se ofreció a los insurrectos sajones y empezó a trabajar con ellos. Derrotados, se retiraron hacia Bohemia mil ochocientos hombres armados. Pero vino el desbande. Mientras Bakunin, agotado, descansaba en Chemnitz, los burgueses de la ciudad lo apresaron y lo entregaron al comandante de un batallón prusiano. ¡El gobierno ruso había estado ofreciendo 10.000 rublos por la captura de su “agente provocador”!...

“LA CONFESIÓN”

El Zar despachó un piquete de tropas y un oficial para que le trajeran encadenado al revolucionario, “su agente”… Pero, había trámites que llenar. Lo encarcelaron en Dresde, cargado de grillos. Después, a la fortaleza de Königstein. El 14 de abril de 1850, Bakunin era condenado a muerte. Pero le conmutaron la pena por prisión perpetua y lo entregaron a Austria.

En medio de numerosos coraceros fue conducido a Praga. Pero, como se dijera que los checos intentaban libertarlo, lo llevaron a Olmutz. Encadenado contra la pared, en su calabozo, el insurgente quiso suicidarse tragando fósforos.

El 15 de mayo de 1851, los austriacos lo condenaron a la horca. Pero, otra vez fue conmutada la pena por prisión de por vida. Semanas después, a medianoche, era trasladado al otro lado de la frontera, transferido al Zar Nicolás I: Un carruaje con las cortinas corridas lo condujo, siempre, con ellos, a la fortaleza de Pedro y Pablo.

Tres años estuvo ahí. Otros tres -1854 a 1857- en Schlüsselburgo. Pero, mucho antes, el coronel Orloff lo fue a ver de parte del Zar, transmitiéndole el encargo de éste: “Dile que me escriba como un hijo espiritual escribiera a su padre espiritual”. Bakunin reflexionó y decidió hacerlo. El texto de ese escrito es la Confesión que aquí publicamos, y que estuvo inédita hasta 1921. Karl Radek, el conocido líder bolchevique, comenta este documento así: “Bakunin estaba preso y, naturalmente, quería salir, y, entonces, tenía, sin duda, el derecho de adoptar el estilo más de acuerdo con la finalidad”. En todo caso, contrasta el tono sumiso de la pieza con el de la vida anterior y posterior del revolucionario. Pero, dicen que “el fin justifica los medios”, y es interesante seguir la biografía de Bakunin.

El Zar, después de leer la Confesión, escribió al margen: “No veo salida que deportarlo a Siberia”; era el 19 de febrero de 1852. Nicolás murió en 1855, y Bakunin seguía en la cárcel. Escribió entonces una carta a Alejandro II, su sucesor. El 14 de febrero de 1857, Bakunin era enviado a Siberia. Ahí permaneció confinado cuatro años, hasta 1861. Tenía diez de prisión y confinamiento, y 47 de edad cuando se evadió hacia el Japón.

De Japón pasó a San Francisco, y de esta ciudad a Nueva York. El 28 de diciembre llegaba a Londres, pobre, enfermo, a casa de su amigo Alejandro Herzen.

ÚLTIMOS AÑOS

Otra vez en actividad de propaganda, rodeado por grupos motores de checos, polacos y serbios. Publicó su “A mis amigos rusos y polacos”, reproduciendo las ideas cardinales de su discurso de París. En 1863 lo vemos en Suecia, tratando de llegar a Polonia para incorporarse al movimiento polaco. Fracasado éste, se dirige a Italia. Durante tres años trabaja en ese país, formando la “Fraternidad internacional”, anticipación de la Asociación Internacional de los Trabajadores (“Primera Internacional”). Sus principales núcleos estuvieron en Italia y España.

En 1867 y 68 toma parte en el Congreso de la Paz, de Ginebra. El 68 funda la Alianza de la Democracia Social, que cooperaría con la Primera Internacional, a la que se adhirió Bakunin en julio. Pronto chocó con Marx. En La Haya, en 1872, éste hizo expulsar al ruso diciendo que quería apropiarse del dinero ajeno, o sea, que era un estafador. En ese período, del 70 al 74, en que se realiza la polémica con Marx, se perfilaron nítidamente las ideas anarquistas de Bakunin. Entonces publicó su “Catecismo revolucionario”. Una de sus ideas cardinales era convertir la guerra franco-prusiana en guerra civil. Quiso encabezar una en Lyon; pero, sorprendido, fue obligado a huir, pasando por Suiza. De ahí salió, muy enfermo ya, a dirigir un motín en Bolonia.

Ya había escrito sus “Consideraciones filosóficas”. Pero la salud flaqueaba a consecuencia de su accidentada vida, de su larga prisión, de sus privaciones, de las persecuciones. Su gran deseo habría sido morir en la pelea. Pero no lo pudo lograr. Agobiado por la uremia y la pobreza, murió en Berna el 1º de julio de 1876.

Debemos indicar que la mayor parte de los datos que hemos aprovechado para esta semblanza bibliográfica de Miguel Bakunin han sido tomados del estudio de Fritz Brupbacher, que precede a la edición francesa de “Confesión” (Ed. Rieder, París), de la vida de “Carlos Marx”, por Franz Mehring (Ed. Cenit, Madrid), y del “Carlos Marx” de Otto Rühle (Ed. Ercilla, Santiago).

Ercilla

Parados y encarcelados



Los insultos sin argumentos suelen ser poco productivos, incluso contraproducentes; se pueden convertir en un serio handicap para la causa común. Suelen ser fruto de la juventud mezclada con justa rabia, puesto que nuestros jóvenes no ven más futuro posible que imponerse a quienes les niegan la vida. Este chaval de 19 años que escribió ese famoso tweet alegrándose de la muerte de Isabel Carrasco es la respuesta juvenil al fascismo cada vez más imperante en nuestra tierra. No me atrevería a calificarlo de imbécil por los tweets que ha escrito, aunque sí que lo haría si se tratase de alguien que haya superado los cuarenta. Me explico; todos hemos sido jóvenes, el corazón bombea mejor la sangre, nuestros músculos están en su cénit, y como dice J.C. Molina <<el jóven sólo piensa en la guerra y el viejo sólo en el amor>>, no es que yo sea un viejo (tampoco demasiado joven), pero siempre me gustó esta frase y aprovecho para meterla, je.

Viendo como ladran los perros de pren$A acerca de los años de cárcel que deberían caerle a este chaval, cuyo máyor delito ha sido estar cabreado porque se le niega el derecho a una vida digna de ser vivida, ya nos podemos hacer una idea de lo que pretende hacer con él la picadora estatal. Quieren convertir una conducta reprobable (aunque con sobrados fundamentos) en un delito de terrorismo, o de apología de la violencia, que a efectos judiciales viene a ser lo mismo. Quieren destrozar la vida de este chaval encarcelándolo muchos años mientras Blesa veranea en Brasil y escupe a los mortales desde las alturas. Por supuesto que no estoy de acuerdo con este tipo de tweets, pero eso no quiere decir que no comprenda perfectamente las causas que han llevado a este chaval a decir semejantes burradas.


Hemos escuchado como los empresarios le dicen a los jóvenes que si hace falta que se vayan a trabajar a Laponia, que no sean vagos y conozcan mundo, mientras tanto, esta chusma que insulta diariamente con total impunidad viven como reyes, a Laponia deberían irse ellos a trabajar de mamporreros de renos. Las plazas de los pueblos andaluces ya no están llenas de jubilados, ahora se les suman cientos de miles de jóvenes para tomar el sol. La puerca esta que representa a los empresarios y que se atreve a calificar de inútiles a los chavales sin formación y que no merecen cobrar ni el salario mínimo, perpetra impunemente sus rebuznos, porque eso no es opinión, eso es simplemente buscar el enfrentamiento social. Esta es una guarra que no merece ser llamada por su nombre, como ocurre con los cochinos, a los que tampoco les ponemos nombre, exceptuando cuando es una mascota y no un bicho cebado para ser convertido en jugosos filetes (sin ánimo de herir sensibilidades vegetarianas...).

Los Estados nunca buscan soluciones razonadas y justas. Siempre maniobran según sus propios intereses. Lo de este chaval tiene fácil solución; si tuviese un trabajo digno, acceso a la cultura y escuchase a personas con un poquito más de luces que él, seguramente no volvería a exponerse de esta manera tan absurda y que no sirve de nada. Ya ha pedido perdón y ha dicho que está arrepentido, normal, ¿qué otra cosa puede decir?, por supuesto que de saber la que iba a liar nunca hubiese escrito esos tweets ¿quién puede pensar que semejante bobada pueda llegar a tener tal repercusión policial y espumarajos de rabia en la caverna mediática de los curas?. 

Nuestro Estado terrorista pretende arruinar la vida de un chaval cuyo mayor delito ha sido escribir varios tweets bastante desafortunados, aunque tienen una causa sobradamete conocida por todos; cuyo delito ha sido ser joven, inconsciente, rebelde y no tener miedo al poder, cualidades intrínsecas a cualquier joven (excepto a los monaguillos y demás meapilas aborregados). 

Se condena a nuestra juventud a la incertidumbre constante, estudien o no, sean inteligentes o no, aunque trabajen como mulos; el caso es que ya no nos necesitan ni para explotarnos, con los chinos y las nuevas tecnologías tienen de sobras para seguir haciendo sus inmorales negocios. Si intentas mejorar tus condiciones de vida, el Estado fascista y terrorista español amenaza con que tus justas reivindicciones sólo servirán para empeorar tu calidad de vida; amenazan con encerrar, maltratar y denigrar a todo aquel que destape la podredumbre moral imperante en todas las instituciones "democráticas" de este mísero país. Ya no se conforman con mantener a más de la mitad de nuestra juventud en el paro perpetuo o la precariedad más absoluta; rodeados de opulencia y despilfarro del dinero de todos, sin un pavo en el bolsillo pero viendo todo el día escaparates llenos de jamones y whisky de a 50€ la botella; ahora, además, también quieren encerrarnos para callarnos, pero el que nada tiene que perder tampoco tiene nada que callar.


Fuente:

Lxs muchachxs de mi barrio.

Consideraciones sobre la situación política española. Federico Urales (1 de junio de 1931)


Federico Urales
Hay, en España, una mentalidad monárquica, una mentalidad republicana y otra mentalidad socialista, y aun dentro de cada una de dichas mentalidades, se manifiestan varias tendencias, como si la organización mental y social fuese un equivalente de los organismos animales.

La mentalidad monárquica es absolutista y teocrática. Cualquier otra opinión que no sea absoluta y teocrática, corresponde al criterio republicano, por lo que a España se refiere. La democracia no puede hermanarse con la monarquía, por la sencilla razón de que pertenece a tiempos políticos distintos. Por esto, cuantas veces se ha intentado juntarlas, se produjo el fracaso. Democracia y teocracia son dos términos que se repelen, y como la monarquía, en España no puede dejar de ser teócrata, es imposible unirla a una opinión demócrata.

La monarquía, que, como hemos dicho, es absolutista y teócrata, tiene del pueblo un concepto de servidumbre, y si algunas veces hace ver lo contrario, es mirando el interés material de la propia teócracia y de la propia monarquía.

Para un teócrata español, el pueblo aun no ha llegado a ser el asalariado que, por un jornal, presta sus brazos determinadas horas. Para los teócratas españoles, sea cual fuere su condición, el pueblo no ha pasado de siervo, y si pasa es para covertirse en chusma encanallada. Su ideología viene del feudalismo y de las armas.

La República es el ideal de la clase media, aunque de ella sean amantes algunos pobres, que, en ideología, no están colocados donde les pertenece. Es ideología de la clase media la republicana, porque tanto ésta como aquella desempeñan funciones sociales más elevadas que la aristocracia y la monarquía. La clase media sale de las letras y de las industrias, así como la aristocracia salió de los castillos y de las guerras. Por esto la República cuenta con tantos intelectuales y la monarquía con tantos militares. La República reune más humanidad y más derechos que la monarquía, pero aun tiene de la patria un concepto nacional y guarda privilegios de clase. Concede al pueblo la libertad de elegir a sus gobernantes, pero aun no le cree capaz de pasarse sin ellos. Los gobiernos, en opinión de la clase media, han de salir de la gente letrada, y como el pueblo no es letrado, ha de tener gobernantes de la otra clase.

En política, la clase media española llega al sufragio universal y a la igualdad ante la ley, pero como la ley está escrita por la clase media, convertida en legisladora merced al sufragio universal que practica una clase en inferior condición, es una ley de privilegios en favor de la clase que la dicta. 

Así como todo lo que es democracia, en monarquía, resulta un cuerpo a ella extraño, todo lo que es igualdad económica resulta, también en la república, un cuerpo extraño. Cuando un republicano dice que es socialista, no es republicano ni socialista, y cuando un socialista dice que es republicano, no es socialista ni republicano. Los que se llaman republicanos socialistas o socialistas republicanos, en política, se lo llaman por estas dos razones: o porque tienen en su mente una confusión de ideas o porque su astucia dispone de un caudal enorme de adaptaciones.

La república, como la monarquía, cuenta con idealidad propia, y el socialismo, como la república, cuenta, también, con propios ideales. Es idealidad de clase lo mismo que la monarquía y que el socialismo, cuando el socialismo no se preocupa más que de la emancipación económica de los trabajadores. En historia propiamente dicha, que se compone de la lucha y de la evolución de las sociedades humanas, así como la historia natural es la lucha y la formación de las sociedades animales, en historia propiamente dicha, repito, unas civilizaciones son hijas de otras y, vista la evolución politica en general a través de la sociología, podría decirse que la raíz de la república es la monarquía y que la raíz del socialismo es la república, siempre refiriéndonos a España.

Estudiando este aspecto de las evoluciones políticas, nos encontraríamos que el primer pensamiento demócrata salió del más inteligente de los teócratas y que el primer pensamiento socialista salió del más inteligente de los republicanos. Sería también la idealidad y no la materialidad la creadora del socialismo. Podrá ser de clase el cuerpo; el cerebro no lo ha sido nunca, porque de la teocracia salió el primer demócrata y de la democracia el primer ácrata contra toda clase de riesgos y de peligros para su persona y para sus bienes. La llama del ideal es superior a todas las conveniencias personales.

España acaba de darse una república democrática, como se dan todas las naciones de evolución política. Las repúblicas dictatoriales pertenecen, de hecho y de derecho, a un concepto político propio de la teocracia, lo mismo que las repúblicas italianas medias y antiguas. Son reminiscencias de tiempos que fueron y obedecen a la misma ley ideológica que esos individuos que, antropológicamente, recuerdan hombres de tiempos pasados, lo mismo que muchas costumbres de hoy recuerdan costumbres de miles de años atrás.

Pero en sociología y en política, caso de que la sociología pueda ser separada de la política y la política de sociología, se avanza por revoluciones.Se avanzará por revoluciones mientras la base de todo sistema político y social sea la fuerza. Quizá y sin quizá, esa situación de fuerza representa un período en la evolución de las sociedades, en la que no creen los "cataclismistas". Esto es, los que dudan que la Tierra sea un cuerpo orgánico que evoluciona por edades y que los hombres evolucionan, también por edades, obedeciendo a la condición de su vivienda. Aquellos creen que todo es casualidad y que un cataclismo puede acabar con la Tierra y sus habitantes sin que hayan obedecido a ley alguna y sin haber realizado ninguna misión, consciente ni inconscientemente.

Discusiones semejantes nos llevarían a las leyes de la mecánica celeste, de las que nosotros no tenemos más que un concepto general. Todas son hijas del equilibrio universal y no es posible la desaparición de un átomo sin que se produzca el desequilibrio celeste y todos los mundos se estrellen unos contra otros. Entonces el caos, pero al llegar aquí una mente serena y juiciosa se pregunta: ¿por qué habría nacido yo y por qué pienso en mí?

Las revoluciones políticas y sociales son como una guerra y de la guerra vienen, esto es, de la fuerza. Los hombres, para adelantar, se preparan para no retroceder. Táctica que seguían ya las tribus nómadas y táctica que han seguido, después, los capitanes. La misma economía del hogar y el mismo negocio, obedecen a dichas tácticas. Para adelantar hemos de tener primero una base segura y observar si se puede establecer otra base más lejos, de más radio de acción y de más sólidas empresas.

Se avanza lo más posible, y cuando uno no se puede sostener en su punto de avance, comercialmente, guerreramente y revolucionariamente, se repliega a su base, formada de ideas o de cañones.

La estrategia militar, que establece una base de repliegue por si es necesaria, y que no sigue adelante de no estar segura de encontrar donde guardarse, no hace más que obedecer a un instinto de vida, instinto que se encuentra, no ya en todos los organismos vivos, sino, también, en toda la materia, caso de que haya materia que no sea viva.

Para la fiera que empieza a merodear, la base es la madriguera. Para el niño que empieza a andar, la base son los brazos de su madre. Para el pájaro que empieza a volar, la base es el árbol donde tuvo su nido.

Felizmente, todas las doctrinas tienen su base. Dios, la de los creyentes; Naturaleza, la de los panteístas. Se arremete contra el adversario o contra las ideas adversarias, y cuando uno se ve perdido, se repliega en la idea de Dios, que creó o en la de la Naturaleza, que crea siempre.

Ahora bien, en política y en sociología, cuando de España se trate, la base de hoy es la República. Excelentes las guerrillas que avanzan, los núcleos que desean ir más adelante; pero no hay que destruir la base de nuestras operaciones para, en caso necesario, tener dónde refugiarnos. La base es ahora la República. Si para avanzar destruimos la República ¿dónde sostenernos ideológicamente luego?

Por otra parte, teniendo uno las espaldas guardadas, lucha con más seguridad de vencer. Sabiendo uno que tiene dónde ponerse a salvo, es más valiente. Por esto los pueblos azotados por ejércitos invasores son más valientes que el ejército que los invade. Por esto uno en su casa es más valiente que en la ajena.

Si se adelanta sin base, es casi segura la derrota, porque nos convierte en cobardes el mismo temor de no saber dónde hacernos fuertes en el retroceso.

Los que sostenemos un ideal que tiene sus raíces en la ideología republicana, hemos de tener una base de nuestra guerra en pro de un mundo mejor, en la República, y ha de importarnos que no se nos destruya la base para replegarnos hacia ella caso de que nos sea necesario.

Las ideas, que, como las del comunismo ruso, no tienen una evolución política, aunque la tenga el comunismo llamado por algunos científico no sin pedantería; las ideas que no tengan sus raíces en la democracia, ni en el libre pensamiento, ni en el laicismo, ni en las libertades políticas, ni en el federalismo, ni en la evolución filosófica, se comprende que lo mismo les importe república que monarquía, democracia que teocracia; pero a los anarquistas ha de importarnos, porque estamos ligados a una revolución moral, a una dignidad espiritual, a una rectitud de conducta y de procedimientos que no son menester en quien, en las luchas político-económicas, no aporta más que la agitación y la destrucción.

No; los anarquistas en las luchas político-sociales, hemos de aportar más que la destrucción y que la agitación; hemos de aportar ideas de libertad, de igualdad y de fraternidad de un superior orden humano.

República o monarquía, en esta hora, ha de importarnos a los anarquistas españoles. La monarquía ya sabemos como nos ha tratado; ignoramos como nos ratará la República, aunque es de suponer que no podrá tratarnos tan mal como la monarquía. No se lo permitirá su contenido ideológico.

Esta República española, sobre todo la catalana, es más cosa nuestra, por ahora. Hemos convivido con sus hombres en las cárceles unos y en el destierro otros, perseguidos todos por la dictadura monárquica. ¿Cómo no hemos de preferirlos a los dictadores que nos perseguían como a fieras, que nos atormentaban cual si se tratara de inquisidores y de herejes, que nos fusilaban por las calles?

Además, existe un caso de conciencia: la libertad de los presos, el refugio que concede a los perseguidos, no ya por las autoridades monárquicas españolas, sino por las dictauras extranjeras.

Y mientras la República española sea el refugio de los perseguidos por sus ideas o por sus acciones contra las tiranías; mientras respete la libertad de propaganda y ponga en práctica la ideología federal dePí y Margall en toda su integridad, y deje que los anarquistas continuemos su obra y la mejoremos practicando, a base de los municipios libres y dueños de su término, las verdaderas ideas de libertad, de fraternidad y de igualdad. Los anarquistas, en nuestro sentir, no debemos hostigar a la República, dejándola que se defienda de sus enemigos de la derecha y defendiéndola nosotros mismos, si es preciso, de clericales, teócratas, reaccionarios dictadores, gente de casta, enemiga de las libertades populares. Esto por ahora.

Y, ademas y sobre todo, es preciso no olvidar que quienes no pusieron dificultades a la marcha de la Dictadura o las pusieron muy débiles, no deben perturbar la de la República, abusando de las mismas libertades que ella nos ofrece.

Pensemos que estamos abocados a una guerra civil y que esta guerra civil puede dejar de nuevo a España en brazos del clericalismo u del militarismo, los enemigos de España y de toda libertad.

El federalismo ha de ser la aspiración de todo anarquista, porque de cuantos sistemas socialistas se ofrecen a la humanidad para establecer la igualdad económica y la libertad política, es el único que no puede caer en la dictadura ni en el nacionalismo. Nos interesa mucho desvincular el individuo del Estado, al objeto de que se acostumbre a vivir sin él, y nada mejor que el federalismo para desvincularnos del imperialismo y de la tiranía a que tiende todo Poder. Es Estado, lo mismo si se llama socialista, que si se dice comunista, tiende siempre a la unidad y a la absorción del individuo.

Que se establezca, en España, la República autonomista, tal como la concibió Pi y Margall, hemos de procurar los anarquistas para, después, rebasar la política y la administración hasta que los municipios sean libres de establecer la propiedad común y de abolir la autoridad, que, al fin y al cabo, la anarquía sólo pretende establecer el ejercicio de todas las autonomías individuales y municipales. Y esta es tarea que se puede iniciar desde ahora. La federación y la autonomía constituyen el surco de la semilla anarquista, que aparta al hombre del Estado.

En resumen, que los anarquistas no han de poner dificultades, por ahora, a la República española.

Federico Urales